Ha llegado el fin de
esta hermosa visita que recibimos los mexicanos, mucho se hablo del Papa antes
de su venida y los mexicanos que hablaban cosas negativas del Papa ahora,
llenos de alegría y paz, confiesan “que decían todo eso porque nunca se habían
dado la oportunidad de conocer a nuestro Santo Papa Benedicto XVI”.
Este viaje nos dejo
recuerdos inolvidables y mensajes invaluables en los que podremos encontrar
claras directrices hacia donde se debe encaminar nuestra vida a partir de hoy.
Así hablaba S.S. Benedicto XVI en el
discurso dirigido a los niños en la Plaza de la Paz en Guanajuato el sábado 24
de marzo de 2012: “Quisiera quedarme más tiempo con ustedes, pero ya debo irme.
En la oración seguiremos juntos. Los invito, pues, a rezar continuamente,
también en casa; así experimentarán la alegría de hablar con Dios en familia”.
En este bello discurso les pedía a los niños “participen en la Misa del
domingo, en la catequesis, en algún grupo de apostolado, buscando lugares de
oración, fraternidad y caridad” y este mensaje va para todos nosotros también,
no solo para sus pequeños amigos como los llamo cariñosamente.
El lunes 26 de marzo de 2012 en el
discurso de despedida en el aeropuerto dijo: “Queridos amigos mexicanos, les
digo ¡adiós!, en el sentido de la bella expresión tradicional hispánica:
¡Queden con Dios! Sí, adiós; hasta siempre en el amor de Cristo, en el que
todos nos encontramos y nos encontraremos. Que el Señor les bendiga y María
Santísima les proteja.” Se despidió de todos nosotros robándonos el corazón y
dejándonos paz y alegría e invitándonos a estar unidos en Cristo ¿cómo
lograrlo? Siguiéndolo, haciéndole caso a su Palabra, convirtiéndonos de corazón
y siendo fieles a la Iglesia que Jesús mismo fundó la Iglesia Católica; vayamos
a Misa todos los domingos, recemos en familia el Santo Rosario, busquemos
grupos de oración y catequesis para que seamos Católicos formados e informados
y sobre todo llevemos la Palabra de Dios a todas partes especialmente a
nuestros familiares y amigos.
“Queridos
amigos, muchísimas gracias por este entusiasmo. Estoy muy feliz de estar con
vosotros. He hecho muchos viajes, pero nunca he sido recibido con tanto
entusiasmo. Llevaré conmigo, en mi corazón, la impresión de estos días. México
estará siempre en mi corazón. Puedo decir que desde hace años rezo cada día por
México, pero en el futuro rezaré todavía muchos más. Ahora entiendo por qué el
Papa Juan Pablo II dijo: «Yo me siento un Papa mexicano».” Palabras del Santo
Padre el domingo 25 de marzo de 2012 por la tarde delante del Colegio
Miraflores.
Que
la alegría y euforia vivida estos días dé fruto en la conversión de nuestro
corazón hacia Dios y en una resolución a vivir una vida Cristiana y congruente,
llevar a Cristo a todas partes principalmente a nuestra casa y a nuestro
trabajo; no se trata de ser “buenos” solo en Misa y en el Templo se trata de
ser buenos siempre en todo momento: no mintiendo, no robando, no engañando, ser
siempre fieles seguidores de Cristo.
“Mi breve pero intensa visita a México
llega ahora a su fin. Pero no es el fin de mi afecto y cercanía a un país que
llevo muy dentro de mí. Me voy colmado de experiencias inolvidables, como
inolvidables son tantas atenciones y muestras de afecto recibidas”
Gracias
Santo Padre Benedicto XVI por su visita, sus palabras y traernos un mensaje que
nos lleno de paz, alegría, esperanza y amor.
FOTOGRAFIA: PBRO. JOSE DE JESUS PALACIOS TORRES
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